La salud y la seguridad de nuestros consumidores siempre han sido una prioridad absoluta para L’Oréal. Al igual que el apoyo al bienestar de los animales.
L’Oréal ha desarrollado un procedimiento muy riguroso de evaluación de la seguridad de sus productos, respaldado por la investigación. Mucho antes de que la sociedad civil planteara la cuestión de los ensayos con animales o en un marco normativo, L’Oréal ha apostado por nuevos métodos de evaluación de la seguridad que no implican a los animales. Como verdadero pionero, L’Oréal reconstruye en laboratorio modelos de piel humana para elaborar pruebas de seguridad in vitro desde 1979, como alternativa a los animales. En 1989, L’Oréal dejó de probar tus productos en animales, 14 años antes de que la normativa lo exigiera. Hoy en día, L’Oréal ya no prueba tus ingredientes en animales y no tolera ninguna excepción a esta regla.
No obstante, algunas autoridades sanitarias pueden decidir realizar ellas mismas ensayos con animales para determinados productos cosméticos, como sigue ocurriendo en China. L’Oréal ha sido la empresa más activa que ha trabajado junto a las autoridades y los científicos chinos durante más de 10 años para que se reconozcan los métodos de ensayo alternativos y permitir que la normativa sobre cosméticos evolucione hacia una eliminación total y definitiva de los ensayos con animales. Gracias a ello, desde 2014, ciertos productos fabricados y vendidos en China como el shampoo, el limpiador corporal o el maquillaje, ya no se prueban en animales.